Orígenes y evolución.
AITASA fué fundada el año 1965 para abastecer de agua industrial a las industrias químicas que se habían empezado a instalar en el Polígono Industrial Sud y a las que, sucesivamente, durante los años 70, se fueron incorporando hasta configurar el Polígono Petroquímico del Campo de Tarragona que ahora conocemos.
Se construyeron pozos y una red de tuberías para hacer llegar el agua a cada una de las industrias, desde las diferentes zonas de captación. Se construyeron dos depósitos de regulación situados en las instalaciones de AITASA en Bonavista, Tarragona.
Inicialmente y durante las décadas de los años 70 y 80, las industrias se abastecieron de agua de pozos propios, gestionados por AITASA.
La sequía continuada de la década de los años 70 unida a la sobreexplotación generalizada de los acuíferos, obligó AITASA a adquirir nuevas fincas en el término municipal de Mont-roig y construir en ellas nuevos pozos, con el fin de hacer frente a la demanda de agua de les industrias que iban instalándose en los polígonos.
Hizo falta buscar otras alternativas, hasta el punto que se llegó a transportar agua en barcos a les industrias situadas en el polígono petroquímico norte y a la ciudad de Reus.
El año 1989 se constituyó el "Consorci d'Aigües de Tarragona" (C.A.T.), fruto del desarrollo de la Ley 18/1981 (conocida como del "ministransvassament"), como ente encargado de gestionar la concesión de un caudal de 4 metros cúbicos por segundo de agua del Ebro para el Campo de Tarragona.
Integrado por Ayuntamientos y industrias del Campo de Tarragona, el C.A.T. supuso una gran mejora para todos, tanto por la cualidad del agua como por las garantías de suministro.
El suministro de agua del "Consorci d'Aigües de Tarragona" a las industrias del polígono petroquímico sud, se lleva a cabo mediante la red de distribución de AITASA.